La depilación con láser se fundamenta en la absorción de la energía lumínica del láser por parte de la melanina presente en el folículo piloso; es por ello que para realizar un adecuado tratamiento de depilación con láser es imprescindible la presencia del folículo (no haberse depilado con métodos de arrancamiento del vello en los 30 días previos), así como que el vello sea pigmentado.
El número de sesiones a realizar es variable dependiendo de muchos factores (edad del paciente, zona a tratar, alteraciones hormonales de base, medicamentos…).
En nuestra consulta disponemos de un láser de alejandrita para depilación, que siempre será manipulado por un médico.